Ayer día 13 de mayo será recordado por los amantes del lied que todavía estamos bajo el impacto que nos produjo el magnífico barítono con su interpretación de los lieder de Schubert que tuvo lugar en el teatro de la zarzuela de Madrid. El programa eran los lieder Ludwig Rellstab de vibrante juventud y derroche de alegría y los mas sombríos sobre poemas de Heine que fueron explicativos de los dos colores de sus voz y de su mejor hacer.

   Florian Boesch, fuera de las ataduras de la tiranía de la ópera, se encontró a sus anchas y disfrutó y nos hizo disfrutar enormemente pues canta con una naturalidad pasmosa y envidiable facilidad con la que fue desgranando los poemas con perfecta dicción mezzovoce cuando tocaba, preciosas notas altas apianadas y otras rotundas cuando la letra de los poemas lo exigían. El triunfo fue total y derivo en tres encore mas  haciendo las delicias del entusiasmado público, al que no se escuchó ni una tos despistada. De estos conciertos sale uno rejuvenecido     que no sabe el artista como se lo agradecemos. Además Florian estuvo acompañado magníficamente por el gran pianista acompañante que es Malcolm Martineau.  Se ensamblo con él y estuvo atento a todos los detalles haciendo de los poemas una creación. Repito acierto total del teatro de la zarzuela, que siga en esa senda de elevar el lied a la máxima categoría.